Cuando se avecinan recortes salariales, aumentos de impuestos, parones en la obra pública y demás desgracias derivadas de la crisis, sabiendo los políticos de antemano que va a costar una fortuna a las arcas de la Generalitat, ¿es de recibo cerrar por ley la Monumental ahora? A ver cuál de nuestros gobernantes va a ser el guapo que tendrá valor para explicar a los ciudadanos que, aunque al negocio taurino en Catalunya le queden tres telenotícies para su desaparición por causas naturales, la prioridad del país ahora es cerrarlo por ley, pagarle a Balañá una millonada y dejar en el paro a unos cuantos trabajadores más.
Y cabe preguntar también quién de los prohibicionistas consolará al industrial o al comerciante catalán cuando el mercado español, hoy por hoy todavía importante, le mande a él y a su mercancía al corral metafórico de la Catalunya idílica y antitaurina ¿y antiespañola¿ sumida en un probable nuevo boicot comercial, esta vez más feroz que el del cava que abonó el terreno de lo anticatalán en las Españas.
Salvador Boix en El Periodico de Cataluña.
NOTA: Yo tengo poca confianza en el Consejo de Garantías Estatutarias. Lo que sí tengo claro, es que prohibir los toros es anti-constitucional. El problema es práctico, pues todos sabemos la situación del Constitucional y el tiempo que tardarían en pronunciarse. Podría ser una victoria moral y sobre todo, una forma de evitar nuevos ataques en otras comunidades, pero en Cataluña se solucionaría poco. En mi opinión, y llegado a éste momento, en lo que hay que insistir es en los COSTES ECONÓMICOS que éste capricho de nacionalistas y animalistas radicales va a suponer a los ciudadanos de cataluña. Y si finalmente se prohíben los toros en Cataluña, a parte de multitud de recursos, tienen que pasar cosas. No puede dar la sensación, de que no pasa nada. Sí que pasa.
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Aunque sea lento, tal y como está planteándose el asunto, mucho me temo que esto acabará en el Constitucional (efectivamente, lo del Consejo de Garantías no parece probable que impida su aprobación).
ResponderEliminarCreo que es importante que el PP hay planteado que una Comunidad Autónoma no es competente para prohibir el toreo. Es un argumento de peso, aunque no es el único. Hay un magnífico artículo que acaba de publicar Gabriel Domenech (profesor titular de derecho administrativo de la Universidad de Valencia) en la que analiza de forma extraordinaria las distintas razones por las que prohibir los toros no sería constitucional. El artículo se titula: "La prohibición de las corridas de toros desde una perspectiva constitucional" y está publicado en el número 12 (Abril 2010) de "El Cronista del Estado Social y Democrático de Derecho", revista jurídica dirigida por el profesor Santiago Muñoz Machado.
Don Lorenzo, un gustazo su visita por ésta casa. El problema, pienso, es que no teníamos que haber llegado hasta aquí. Una posible victoria en el Constitucional marcaría un punto de inflexión para evitar que el virus se expanda a otras comunidades, principalmente Galicia,Asturas y Baleares, pero en camino habrán quedado muchas cosas. Y sobre todo una, la legitimación del discurso antitaurino en la sociedad. Que para mí es lo más grave. Y lo estamos viendo. Lo de Cataluña se viene viendo desde hace años, principalmente, el último lustro y nadie se lo tomó en serio. Desde el punto de vista del derecho, político, taurino, social y cultural se debería haber actuado mucho antes, sin llegar hasta ésta situación.
ResponderEliminarUn abrazo.
Raúl, propongo que hagas un post dedicado a la no-feria de Segovia. Ya sabes que este año no van a dar festejos por falta de subvenciones. Creo que puede dar para que analices un poco la coyuntura. ¡Un abrazo!
ResponderEliminarDesperdicios
Un placer participar en este espacio de reflexión que sigo con habitualidad aunque no participe directamente demasiado.
ResponderEliminarEs cierto que el discurso antitaurino ha tenido cierto impacto y, sobre todo, que no han sido los taurinos, sino los aficionados, quienes han buscado los argumentos para reivindicar y defender la tauromaquia desde la ética y la estética. De esto, difícilmente nos libraremos. Mi única reflexión es que si no se para desde un punto de vista jurídico, el asunto se extenderá. Entre otras cosas, porque a diferencia de los aficionados a los toros, a los antitaurinos les acompaña el odio y quien odia no cesa en su ataque.
Por eso, en mi opinión es preciso un pronunciamiento claro del constitucional (sobre el ámbito competencial, pero no sólo) y, a la vez y para siempre, un cambio en el taurinismo que reivindique y organice la Fiesta desde su perspectiva cultural. En las próximas semanas avanzaré esto con algo más de detalle.
Córcholis, Desperdicios, usted siempre mandando deberes. Se hará lo que se pueda. De todas formas, no te promero nada. Éso sí, si quieres tienes el blog a tu disposición.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo D. Lorezo. Ésa es mi batalla. Que fuera del día a día,de toros y toreros, tiene que haber una estructura que se preocupe de los aspectos jurídicos, polítcos, sociales, culturales...del toreo. Una estructura, financiada y con objetivos a largo, medio plazo. Un saludo.